viernes, 9 de abril de 2010
Nuestra Primavera
la sangre nos altera.
Las flores saldrán,
las abejas polinizarán.
El sol llegará,
y calor nos dará.
De vez en cuando,
un poco de viento nos va dando.
Un poco de agua,
también nos traerá.
Un poco de todo para combinar,
¡Con la primavera los campos veras cambiar!
FIN
Hecho por Ana Inma 5ºB.
La Primavera De Juan
En Abril aguas mil,
pero este año
seco se queda
el río Genil.
En Marzo hay
muchos vientos,
pero a Mayo,
Ra le dió un escarmiento.
Es Primavera,
las flores llegan,
sale el Sol
y le sigue el girasol.
Los dos amigos
Hecho por Javi de 5ºB
La Primavera de Ana Cristina
jueves, 8 de abril de 2010
EL LADRÓN BUENO
Pedro era un niño de quince años que vivía en Venecia. Pedro que sabía conducir barcas y lanchas.
Salió un día de verano. Cuando ya volvía a su casa se encontró con una pandilla de ladrones y le dijeron que se uniera a su pandilla y Pedro aceptó.
Al cabo de la semana, Pedro fue con su pandilla de ladrones a una cueva. Cuando llegaron a la cueva, eligieron a Pedro para ir el primero ya que él era el nuevo. Pedro asustado y temblando pensó en lo mal que se estaba portando, y en ese mismo instante ”plaf” cayó en un tobogán que lo llevó hacia un mundo paralelo.
Cayó justo en un puesto de fruta y le preguntó al frutero: -¿donde estoy?
Y el frutero dijo: -Pues no lo sé, pero yo estoy aquí, dijo el frutero cabreado.
Pedro, asustado salió corriendo. Al cabo de otros rato se lo preguntó a un ciudadano y le dijo: -pues estamos en Humorandia. Pedro miró en los periódicos y libros, y era verdad, ya no estaba en Venecia. ¿Pero, cual era la salida?. Se lo preguntó a un vendedor de bolas mágicas.
Cuando llegó al lugar indicado leyó: “Bar Las Salinas” y dijo. Vaya farsante.
Cuando entró se echó unos amigos y les preguntó lo mismo que al vendedor de bolas mágicas. Felipe, su nuevo amigo le contesto: -que si lo sabia, pero que tenía que pasar varias trampas, y para ello tenia que ser inteligente. Las trampas se encontraban en la otra punta del mundo.
Cuando llegaron, primero entró Felipe y, como era un ladrón no se arriesgó. Al entrar Pedro, se abrió la puerta porque él se arrepintió de ser ladrón. Y cuando salió se separó de la pandilla de ladrones.
Los fieles amigos
El vestido magico
Secretos ocultos
conocer lo que había en los túneles de Grandville, pero siempre
tuve miedo, los mayores nos asustaban con los fantasmas o monstruos
que allí habitaban. Nunca llegamos más allá de donde la luz del
sol daba. Pero la curiosidad era más fuerte.
pueblo costero refugio de piratas, corsarios y demás maleantes, que
era conocido por todos por sus maravillosos túneles; era todo un
laberinto de la tierra hecho por y para los piratas. Con los años se
fueron olvidando de que aquello existía, pero siempre hubo quien se
adentraba en ellos y alguno que otro sacó algún tesoro, monedas de
oro sobre todo. Con el tiempo llegó a ser una fantasía que más de
uno quiso hacer realidad.
corriendo bastante nervioso y agitado. Nos reunió a todos y nos
contó que había escuchado a sus abuelos hablar en voz baja que en
los túneles había algo extraño de noche se veían destellos de
luces.
atentamente a James. Entonces Alíce dijo: - ¿Por qué no vamos esta
noche?
ponerse nerviosos nada más pensar que fuera en realidad que
estuvieran buscando un tesoro y ya se veían participes de ello si
eramos nosotros quien lo encontráramos. Cada vez se ponían mas
alegres. Yo seguía teniendo miedo pero callaba y escuchaba los
comentarios de cada uno. Unos decían de ir esa misma noche y otros
comentaban de prepararlo todo bien e ir al día siguiente. Yo no dije
nada, solo asentía con la cabeza .
linterna y al anochecer, como cualquier viernes, quedamos para salir
y no levantar sospechas en los padres. Cuando todos habíamos llegado
al centro de reunión, tomamos el camino al acantilado que era donde
había una de las entradas a los túneles, la más escondida, para
evitar que nos vieran. Una vez ya adentrados en el laberinto, cada
vez mas oscuro, yo tuve ganas de salir corriendo, pero era mas el
miedo de irme sola que el de seguir con mis amigos y me arme de
valor y callé. Las luces despertaban a los murciélagos que allí
habitaban. A nuestro alrededor todo era recto, hasta que llego una
bifurcación y ya no era un camino eran dos.
otros que no. Hubo una pequeña discusión de ir juntos a derecha o
izquierda y votamos. Tomamos la izquierda, que fue la mayoría.
Seguimos, pero cuando anduvimos buen rato, escuchamos voces que
salían del interior del túnel en el que nosotros íbamos y
callamos. Apagamos las luces y seguimos en silencio hasta llegar
cerca de donde las voces se escuchaban y pusimos atención. Parecían
voces de ultratumba sacadas de una película de terror. No nos
imaginábamos personas, gente allí. Nos hacíamos muchas preguntas:
-¿que hacían allí? ¿desde cuando estaban allí?
si avanzar y que nos pillaran o quedarnos donde estábamos. Entonces
decidimos avanzar y que fuera lo que el destino nos tuviera
preparado. Cuando llegamos a lo que parecía una pequeña estancia
¡GUALA! Eran nuestros abuelos.
encontrar un tesoro que apenas sabíamos que existía. Nos quedamos
helados al descubrir que todo era cierto, había un tesoro .
tesoro antes de que se fueran los abuelos. Pero si seguíamos
llegaríamos hasta ellos y por el otro lado no sabíamos lo que
había.
decidimos ir por el otro camino.
nuestras manos, grandes monedas de oro, metidas en un cofre. Cogimos
el cofre y lo sacamos hasta la superficie y nos repartimos el botín.
Hecho por Ana Inma 5ºB
La leyenda
Hecho por Laura de 5ºB
El país de chocolate
Manuel. El vivía en una casa con sus padres y su abuelo. Manuel
tenía el pelo castaño y rizado. Sus ojos eran marrones y alargados.
Su nariz era chata. Tenía pecas. De estatura era mediano y delgado.
vivía en un país de chocolate y pensó: ”Ojala ese sueño se
hiciera realidad”.Amaneció y el sueño que había tenido se lo
contó a su madre.
Cuando llegó a su casa Manuel se fue para su cuarto para cambiarse los zapatos,miró al armario y vio una cosa que él nunca había visto: ¡Era una puerta!.
Hecho por Nuria de 5ºb
El mejor tesoro
Había una vez una niña que vivía con su madre en una enorme casa de la ciudad de Tanincal.
Hecho por Ana Cristina 5ºB